31 agosto 2006

Vamos, vamos



Me alegro mucho de que ya sea el último día de agosto, que la gente vuelva a su vida, que podamos disfrutar de lo cotidiano. Vale ya de darle de comer al tiburón tigre, de montar en camello, de embadurnarse de sudor, crema y arena, de tener el cerebro en chancletas... Intensidad, presión en defensa, rapidez en ataque...Vamos, vamos... a trabajar, coño, que hay mucho tajo, cada uno en lo suyo.

30 agosto 2006

Hagan como yo

Lean varias veces al día el blog de Marisancho Menjón. Y háganle caso. Es una de las personas más lúcidas de esta tierra
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Necesitaría una señal. Si hubiera vida inteligente al otro lado...

27 agosto 2006

Los ojos de leer tu nombre


Antón Castro ha recogido una galería de miradas bajo el título de "Los ojos del mundo".
Estos que yo traigo no forman parte de esa serie de miradas tiernas, morbosas, inquietantes o turbadoras. No son los ojos del mundo, pero son los ojos que guardan mi mundo.
Son los ojos de llorar, de guardar tu recuerdo, los ojos que quisieron aprenderte -y a veces olvidarte-, los testigos de tu ausencia, los ojos de leer tu nombre, que te miran incrédulos cada mañana, que te buscan, que tanto te han buscado, que te acarician, los ojos que gritan lo que callo.
Los ojos amargos de las despedidas, los ojos que se iluminan cuando te nombro, que intentan atrapar la vida, los ojos de la memoria, los ojos que miran esperanzados el futuro.

26 agosto 2006

Buen rollismo total

[Guillermo ha elegido para nosotros esta tira de Mafalda]

22 agosto 2006

Veranear en ti

Cuenta atrás. Abandonaremos los decorados cartón piedra que construimos para nuestras vidas, esta suerte de spaguetti western que son últimamente las vacaciones, y volveremos a la realidad. Cada uno a "la pequeñez de sus días", a la intimidad de su sinvivir.
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O veranear en ti

20 agosto 2006

vida es vida

Posiblemente tiene que ver con la luz, con la temperatura o con el sabor del primer café del día. No lo sé. Quizá dependa de las palabras que murieron en nuestra boca sin ser pronunciadas, de los pensamientos que circulaban por nuestro cerebro y que se pierden por el sumidero de las ideas como fetos sin terminar de hacer, engendricos de la razón que sueña. O será que no has acertado con los calcetines que le iban bien al día... Enseguida te das cuenta de que no estás cogiendo el ritmo, que no estás dentro del partido. Hay que aceptarlo así. Esta es la grandeza de vivir (vida es vida, no hay día pequeño, unas veces se gana otras se pierde, etc.). No hay nada predeterminado: Igual que cualquier día puedes tener un buen día y armarla otras veces te cuesta llegar al final, no recuperas ni en los descensos, ni te interesa nada de lo que escuchas ni tienes nada que decir.

19 agosto 2006


Antón Castro recuerda a Federico García Lorca
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[Sobre la sede digital del Museo Pedagógico de Aragón]

Nuestras vidas transcurren, irremediablemente, en el tercer entorno, en ese espacio denominado por autores como Javier Echeverría o Manuel Castells Telépolis o Galaxia internet, un espacio utópico (en el sentido recto de la palabra) que crece incesantemente como consecuencia de la extensión de las redes y donde cada vez pasamos más tiempo y hacemos más cosas. Es evidente que cotidianamente acudimos con más frecuencia a la red para comprar, para formarnos, para comunicarnos, para buscar información, para entretenernos, para trabajar, etc., hasta tal punto que hemos de admitir que tenemos una identidad analógica y otra digital. Por todas estas razones es un error pensar que las redes tendrán importancia en el futuro. La Internet es importante ahora mismo y posiblemente ya es cierto que aquello que no está en la red, no existe.
El Museo Pedagógico de Aragón es un espacio físico localizado en la plaza de López Allué de Huesca, un edificio que tiene una entidad atómica, analógica, una localización concreta y que, de la misma manera, reclama una existencia digna y funcional en la red. Museo Pedagógico de Aragón también ha de ser un espacio digital que permita que desde cualquier lugar del mundo, todos los días del año quien lo desee tenga la posibilidad de acercarse al museo y recorrer sus salas, la posibilidad de consultar parte de su fondo y de participar en sus actividades.
[De víctor juan, Museo Pedagógico de Aragón. Virutas de un proyecto]


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Palma de Mallorca. Ayuntamiento
Javier Burbano me envía este trucador para mi colección que, en realidad, es la colección que están reuniendo mis amigos. muchas gracias

Escuela abandonada


Hace unos días Luis Alegre escribió un artículo en As en el que recordaba, entre otras cosas, el abrazo que Pepe Melero y Alberto Alegre se dieron cuando Nayim metió el goldenayim. Si alguien ha localizado la versión digital de este texto o puede enviarme el artículo se lo agradeceré.



Escuela abandonada. Fotografía "Palabras sencillas" (Jaime Sorolla)

18 agosto 2006

Pepe Melero, consejero del Real Zaragoza

[Pepe Melero en Albarracín. Fotografía Cristina Grande]
Abrígate, maño
[Se confirma la estrategia. En el 2007 ganaremos la liga y en el 2008 la Champions.
El año de la Expochampions]


Su padre se hizo socio hace cincuenta años. Por eso dentro de unos meses será distinguido con la medalla de oro del Real Zaragoza. Hoy no habrá nadie más feliz que el señor Melero que ya sabe que su hijo es consejero de este equipo que nos hace sufrir y disfrutar como sólo se disfruta y se sufre con lo humilde, con lo pequeño, con lo incierto.
Pepe Melero es consejero del Zaragoza. No podían haber elegido a nadie que ame más al club. Hace 31 años Pepe Melero estaba en La Romareda el día 30 de abril de 1975 cuando el Zaragoza de García Castany, Arrúa y Diarte, le metió seis goles al Madrid. Al mismo tiempo que Simarro, en el minuto 76, coló el definitivo 6-1 en la portería que aquella tarde no supo guardar Miguel Ángel, un señor que se sentaba junto a Pepe en el campo miró al cielo y dijo: “Dios existe”.
También se han cumplido 30 años desde que Pepe Melero dio una vuelta de honor junto a los costaleros que llevaban en volandas a José Luis Violeta Lajusticia, el León de Torrero, el día del ascenso a Primera en 1972.
Hace unas semanas, Pepe nos contaba a Ángel Artal y a mí que había preparado un pequeño informe para José Antonio Labordeta en que demostraba que el Zaragoza era el equipo, tras el Madrid y el Barcelona, que más títulos ha conseguido en los últimos 20 años.
Los zaragocistas saben la importancia que este nombramiento tiene para el Zaragoza, por eso mi hijo Guillermo me ha abrazado cuando he terminado de hablar por teléfono con Yolanda. "¿Estará en el banquillo?" -me ha preguntado Guillermo-. No lo sé. Pero Pepe tiene el don de consejo. Nos espera mucha felicidad. La misma que sienten los amigos que comparten con Pepe tardes de zaragocismo en La Romareda: Antonio Pérez Lasheras, Ismael Grasa, Rodolfo Notivol, Félix Romeo y, cuando sus obligaciones parlamentarias se lo permiten, José Antonio Labordeta.
El pasado 8 de febrero cuando el Zaragoza le metió seis goles al Madrid Ignacio Martínez de Pisón le escribió un mensaje a Pepe Melero en el que le decía "Esta noche, abrígate, maño". Fue un buen consejo.
miércoles, 7 de junio de 2006

16 agosto 2006

Cuando ya no esperaba nada

El gran Rodolfo, el auténtico Rodolfo Notivol



Cuando ya no esperaba nada de la vida (es una manera de empezar el comentario) he recibido Cretas. La colectivización de un pueblo aragonés durante la guerra civil española, 1936-1937, un libro que me envía Jaime Sorolla. Muchísimas gracias. También he recogido del correo El Gurrión de Labuerda, la revista que dirige en Mariano Coronas.

[·]
Antón Castro y yo tenemos un ejemplar del libro de Pepe Melero, pero no lo podemos contar ni enseñar. Pepe nos ha dicho que nos esperemos porque el libro no se distribuirá hasta septiembre. Pero no me ha dicho que no publique la maravillosa acuarela que Pepe Cerdá pintó para la cubierta de Los libros de la guerra. Así que la pongo aquí.
[·]

Hoy se cumplen 62 años del asesinato de Paco Ponzán por los nazis en Toulouse.
¡¡ Viva Palmira Plá !!

[·]

Al escribir los nombres de Palmira Plá y de Paco Ponzán me viene al corazón el recuerdo de Rodoldo Notivol, que estará escribiendo maravillosas historias para nosotros.
¡¡Viva Rodolfo Notivol !!

Doce años

Me enamoré de una niña de doce años. A mí me parecía que me había enamorado de una mujer de doce años. Coincidíamos en la piscina, nos cruzábamos en la calle Mayor, en el tontódromo, mientras comíamos pipas o chupábamos uno de aquellos polos de hielo que hacía Próspero en su confitería. Antes de aquel verano no la había visto nunca. Supongo que andaría muy ocupado en mis cosas, cosas de hombres, ya se sabe: el fútbol, las bicicletas, la escopeta de perdigones...
Un día la acompañé a su casa y en la puerta, después de dos horas contándole bobadas, le dije que me gustaba. Era la primera vez que le decía a una chica que me gustaba. Cuando ella ya subía por las escaleras me dijo "tú a mí también me gustas". Qué quieren que les diga... Mi madre me castigó por llegar tarde, me dijo que si tal que si cual, que si esto que si aquello, pero a mí todo me daba ya igual. Por primera vez iniciaba una relación con alguien a quien no conocía de siempre (un vecino, un amigo de mis padres) o por accidente (un compañero de pupitre). Quería aprender a otra persona y quería contarle quien era yo: un hombre maduro de 13 años que adoraba a mi abuelo Valentín y que dejaría cualquier cosa por ir a pescar con él.
Hace mucho tiempo que no veo a Olga, pero aún pregunto por ella cuando coincido con personas que la conocen y la tratan. Todo esto me pasó ayer. Y lo recuerdo precisamente hoy, cuando Carmela cumple 12 años, los mismos que tenía aquella mujer de la que yo me enamoré hace treinta. Que seas muy feliz, Carmela

15 agosto 2006

Querer ser

Estos días pensaba que me gustaría ser director general de la República, un director general como Rodolfo Llopis. Ya sé que es un poco difícil. Al fin y al cabo no tenemos que desear solo lo probable. Es mejor perseguir imposibles. Luego me he dado cuenta que me bastaría con tener un proyecto, una idea que pudiera defender contra viento y marea. Para que un proyecto pudiera comprometerme hasta dar sentido a mi vida apenas debería tener que ver conmigo. Trataré de explicarme. Tener un coche más grande, una casa más grande, hacerme catedrático o ganar un puñado más de euros no entraría en esta categoría de proyectos. Todo eso está bien, pero no me haría vivir con emoción. Estoy pensando en un proyecto para otros, para hacer la vida mejor a las personas que no conoces (y a las que conoces también). Una causa justa. Creo, sinceramente, que es casi seguro que no seré director general de la República, aunque no descarto absolutamente esta posibilidad. Pero en cualquier momento puedo cruzarme con un sueño que me atrape, que me haga querer ser. Será suficiente. Daría cualquier cosa por tener un sueño.

14 agosto 2006


Miguelito, genial. Recuerdo algunas formulas de cortesía que he oído en alguna ocasión: Servidora, Presente, Usted me manda, Fulanito, para servirle a usted, Ave María Purísima: Sin Pecado Concebida, Póngame a los pies de su señora, A sus pies...

13 agosto 2006

Mediado el otoño

Mientras Víctor Pardo está tramando la revolución por las calles de Huesca, en sus sanlorenzos, enfundado en una camiseta con la viñeta más ácida de El Roto, yo estoy aquí, en mi puesto de mando, trabajando como un jabalí, diseñando la primera exposición temporal del Museo Pedagógico de Aragón que podremos inaugurar, previsiblemente, mediado el otoño, poco después de que se presente el libro que Antón Castro publicará en Destino. Para entonces ya se habrán agotado las dos primeras ediciones de Los libros de la guerra, el gran libro que Pepe Melero ha escrito para todos nosotros. Por pura lógica, por esos días Javier Torres se habrá comprado el Nokia que hoy aún no está a la venta, Rosa Tabernero y sus compañeros estarán preparando las III Jornadas universitarias sobre Literatura Infantil y Juvenil (las II se celebrarán en Huesca los días 4, 5 y 6 de octubre), Blanca, que este septiembre inicia su último curso de primaria, estará contando los días que le quedan para librarse definitivamente del comedor escolar, Guillermo llevará la estadística de los goles del Zaragoza, el equipo que va a ganar la liga y que a mitad del otoño le sacará una docena de puntos al Real Madrid. La vida. A Jaime Sorolla y a José Luis Capilla sus nuevos alumnos ya no les parecerán, después de las primeras semanas de curso, tan feos como en septiembre. Y yo... yo recordaré este verano sin saber a qué carta quedarme. Si dijera la verdad, nadie me creería.

12 agosto 2006

De súbditos a ciudadanos: El programa educativo de la II República

He vuelto a leer, esta vez en la edición que Antonio Molero ha preparado para Biblioteca Nueva, La revolución en la escuela. Dos años en al Dirección General de Primera Enseñanza, el emocionante libro de Rodolfo Llopis en el que repasa los logros del primer bienio republicano en materia de educación y cultura. Durante aquellos dos años de trabajo frenético -ni un día de vacaciones, jornadas de 9 a 10 de la noche- Llopis redactó decretos, órdenes y circulares que permitieron crear escuelas, aumentar las plazas de maestros y dignificar sus sueldos, leyes que garantizaban el respeto a la conciencia del niño y del maestro, la libertad de cátedra, la coeducación, el laicismo en la escuela, la creación del Patronato de Misiones Pedagógicas... Rodolfo Llopis, profesor de la Escuela de Magisterio de Cuenca, fue director general con los ministros Marcelino Domingo y Fernando de los Ríos. Se hizo colocar en su despacho del ministerio los retratos de Pablo iglesias, Francisco Giner y del señor Cossío. También recuerda las injurias, las calumnias, las campañas interesadas, orquestadas y dirigidas por el teresianismo, por los jesuitas, por el manjonianismo... Cuenta Llopis que la República le regaló a Jaca un gran Grupo Escolar de 16 unidades -el ayuntamiento únicamente cedió el terreno-, el Grupo Escolar "Doce de diciembre", para agradecer la gesta de esta población aragonesa...
En esencia, el programa de la República consistía en convertir en ciudadanos a aquellos que estaban llamados a ser súbditos. En las páginas del libro de Rodolfo Llopis late la pasión con la que aquellos hombres se comprometieron con este proyecto.
Les sugiero que lean La revolución en la escuela. Les entrarán muchas ganas de trabajar. Yo he sido feliz mientras leía.

11 agosto 2006

El olor de la vida en sazón

La higuera ya se arrastra por el suelo. Demasiado peso para la frágil madera de sus ramas. Cada año contemplo este ceremonial que me devuelve a los días más felices de mi infancia cuando aprendí que el tiempo se escapaba sin remedio, que era inútil empeñarse en detenerlo, que cada verano es igual y diferente al anterior. Primero se ajarán sus vestimentas como si fueran pobres o mendigos. Luego se enrojecerá su ojo de cíclope, un ojo dispuesto para el llanto por el que llorarán una lágrima de azúcar, casi de miel. Finalmente, su cuello parecerá el de un ahorcado. En unas semanas los pájaros serán felices picoteando los higos más maduros, los mejores, los inalcanzables, los que eligieron nacer más cerca de sol, en lo alto del árbol. De los higos lo que más me gusta es el olor. Caen al suelo y se mezclan con la tierra. El olor de la vida en sazón, el olor del final del verano.

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Todo va a cambiar, Salinas. Y yo lo quiero todo, como si esto fuera Renault ocasión

El cielo que miraba Paco Ponzán




Blanca hace fotografías para regalarme el cielo. "Ya no fotografías el cielo que miraba Paco Ponzán". El cielo que miraba Paco Ponzán... Descubrí que aquel cielo es el mismo cielo que cobija mis sueños, el mismo cielo que, a veces, miraba Palmira Plá, el cielo que le traía su recuerdo...

09 agosto 2006

Cataticos






Un trozo del Guggenheim de Bilbao -desde la Qtek-
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"La escuela pública es estupenda, pero tiene dos problemas muy graves a los que ningún gobierno se enfrenta: las nuevas tecnologías y el idioma inglés son irrelevantes en la escuela pública, puro relleno" Consenso en el atraso, Mariano Gistaín
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El mono cibernético, en el blog de Pepe Cerdá
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Crueldad. Ya han montando "La vuelta al cole" en el centro comercial
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El sábado pasado leí en El País que ya se venden navajetas suizas con discoduro incorporado




07 agosto 2006

Que el hombre te ignore


He reunido algunos textos de mi hermanico Víctor Pardo y los he guardado en un rincón de esta casa.

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Esta osa vive en Borce, cerca de Bedous (Francia), tiene 34 años y una hija de 4, que debe de estar en plena adolescencia a juzgar por las discusiones que mantenía por cualquier cosa y sin venir a cuento con su madre.
No me extraña que a mi hermano Carlos le fascinen estas criaturas. Cuando éramos pequeños, algunas tardes de verano o algunos domingos por la mañana salíamos de paseo con nuestros padres, nos acercábamos hasta el parque Bruil y veíamos de lejos al oso que estaba preso en una inmunda jaula. No me gustaba acercarme. Era un espectáculo lamentable. Relaciono en mi recuerdo la imagen de aquel animal enloquecido, la triste estampa del oso desesperado, entristecido y deprimido por la crueldad de los humanos con la dictadura del general Franco. Quizá porque conocí a algunas personas que miraban con la misma mirada del oso cautivo y vivían con la misma resignación y falta de esperanza con la que el oso consumía sus días, pisoteando sus excrementos mezclados con las barras de pan duro que la gente le arrojaba al interior de la jaula. Relaciono al oso tuerto por la perdigonada que le acertó cualquier hijoputa, que a buen seguro celebraría a risotadas su bravuconada, con la falta de sensibilidad que caracterizaba al país. El pestilente oso del parque resume en mi recuerdo la suciedad de una sociedad mugrienta, indiferente al sufrimiento. Creo que una de las primeras campañas ciudadanas en la Zaragoza de los años setenta fue la reclamación de la libertad para el oso del Parque Bruil. No estoy seguro de que por fin se lo llevaran de aquella jaula. No sé qué fue de él. No supe qué edad tenía, de dónde había venido, ni si recuperó parte de la dignidad que los hombres le robaron. Ojalá muriera lejos de cualquier mirada humana.

06 agosto 2006

Ramón Acín

Hoy hace setenta años que fusilaron a

Ramón Acín

[Setenta años sin Ramón Acín
Víctor Pardo Lancina]

05 agosto 2006

Borradores


Como todas las semanas, ayer estuve en el Mercado Central comprando la fruta y la verdura. Pili me pide que le diga al consejero Melero que los asientos de La Romareda (La Bombonera de Aragón) tienen que estar más limpios. A Julio no le parece del todo bien que haya venido Gerard Piqué cedido por un año sin opción a compra, pero tiene que aguantarse. He pasado por la fnac para ver, por el capricho de mirar los ordenadores portátiles y las pdas.
Por la tarde fui a Aragón Televisión y estuve un rato con Víctor Pardo y con Antón Castro. Antón nos había invitado a su programa Borradores. Yo comenté el 116 de Rolde y hablé de la colección Arte Rolde. Víctor y Antón hablaron de la guerra en los Monegros, de la exposición Perfiles. Aragón en guerra que ha recibido más de 1000 visitantes en quince días y de A una milla de Huesca, el diario de la enfermera australiana Agnes Hudgson. Lo he pasado muy bien y he aprendido mucho.

Gritar contra el viento


Agnes Hudgson, A una milla de Huesca. Diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Edición de Judith Keene y Víctor Pardo Lancina. Zaragoza, Rolde de Estudios Aragoneses/Prensas Universitarias de Zaragoza, 2005.

Como escribió José Luis Melero en Leer para contarlo, a veces un libro tiene una historia tan apasionante que merecería contarse en otro libro. A una milla de Huesca es el diario personal de Agnes Hodgson (1906-1984), una enfermera australiana que recorrió el mundo para colaborar con el Gobierno de la República española en su lucha contra el fascismo. El 24 de octubre de 1936 Agnes Hodgson embarcó junto a otras tres enfermeras, en el Oronsay, en el puerto de Sidney y llegaron a Marsella un mes más tarde. En el monumento erigido en Canberra a la memoria de los sesenta hombres y una docena de mujeres que fueron voluntarios en la guerra de España puede leerse: “A pesar de ser pocos y de no ostentar poder alguno, y aunque parecían a menudo gritar contra el viento, su gesta fue verdaderamente, un capítulo de valentía en la historia de Australia”.
La profesora Judith Keene, especialista en la Guerra Civil española, anotó y editó este diario en 1988. Alberto Gil Novales escribió sobre los libros que sería necesario traducir y en aquella relación mencionaba el diario de Agnes Hodgson. El ingeniero Paul Adkinson, que trabaja en Huesca, le encargó a un amigo que comprara en Londres The last mile to Huesca y le contó a Jesús Castiella, natural de Grañén, que Agnes había estado en su pueblo. Paul Adkinson hizo la primera aproximación a la traducción del diario –que ha completado finalmente Isabel Pahissa- y la dejó depositada en el Instituto de Estudios Altoaragoneses. En cuanto Víctor Pardo leyó el texto y se dio cuenta de la importancia de este libro para todos nosotros, ofreció al Rolde de Estudios Aragoneses la posibilidad de editarlo.
Además del prólogo de Gabriel Jackson, A una milla de Huesca incluye el estudio de Judith Keene sobre la Guerra Civil en el que nos ofrece la visión de la situación española desde Australia y la documentadísima investigación de Víctor Pardo sobre la guerra en los Monegros. Víctor Pardo ha terminado conociendo a todos los protagonistas de esta historia. Ha escuchado a las personas que tenían algo contar, ha leído sus memorias, ha buceado en archivos familiares, ha recorrido los escenarios, ha recogido el testimonio de personas como José María Marcén, Adoración Abad, Jesús Anoro o Roberto Mateo que guardaban el recuerdo palpitante de los días de lucha, de terror y de esperanza. Sabemos que todo fue real porque hace setenta años hubo hombres y mujeres que se enamoraban, sufrían, lloraban y escribían poemas, llovía o hacía calor, se dejaban seducir a la luz de la luna, se amaban, les mordía el hambre, llegaban al hospital con los pies deshechos, jugaban al fútbol y al tenis, recibían cartas, posaban sonrientes para las fotografías que se recogen en el magnífico álbum que cierra el libro, morían destrozados por la metralla, envenenados por los microbios o por la sangre corrompida.
A una milla de Huesca es un espacio literario, metafórico y simbólico en el que ocurrieron episodios solidarios, hermosos y crueles en medio del gran desastre, el mismo territorio en el que Orwell se prometía tomar un café en Huesca, una suerte de Macondo en el que Víctor Pardo se ha sumergido para escribir los nombres de las víctimas y el de los verdugos, para devolvernos la memoria, aunque sea la amarga memoria, tan nuestra como al gozosa memoria de los días felices.
A una milla de Huesca refleja la vida en un hospital de guerra, la vida tal y como la pudo vivir una enfermera australiana que llegó a Grañén cuando tenía 30 años. Junto a las anotaciones que nos hablan del cansancio, de la desesperación, de la tristeza y de la impotencia ante las vidas segadas y las amputaciones, Agnes Hodgson se detiene en las excursiones, en los baños en el río, en los bailes, en las canciones, en las muchachas vestidas con sus ropas de domingo... Pinceladas que terminan conformando un desgarrado cuadro de lo que fue la guerra y de la vida, claro, que nos arrastra a pesar de todo.

Víctor M. Juan Borroy

Visitantes

El Museo Pedagógico de Aragón ha recibido 602 visitas durante su primer mes de funcionamiento. Son muchas y pocas. Depende, como todo. Sé que multiplicaremos esta cifra en las próximas semanas.

03 agosto 2006

[Gracias por venir, Cos]

A veces cuando Mariano Gistaín nombra a las personas que han venido de fuera suele completar el comentario con ese paréntesis: gracias por venir. El otro día algunos de estos viajeros que persiguen la simple utopía de vivir encallaron con su cayuco a unos metros de la orilla y sorprendieron a los bañistas en una playa de Tenerife. La gente entraba en el agua para ayudarles a salir, les cubría con sus toallas playeras, les ofrecía agua y un poco de fruta a aquellos seres humanos que no se tenían en pie...
Dejan sus casas, su familia y cuanto han sido. No tienen esperanza, no tienen nada que perder (salvo la vida), y los mejores, los más fuertes, los más valientes vienen a hacer los trabajos que nosotros no queremos hacer. Y aquí se hacen aragoneses. Aragoneses de todos los colores. Y sus hijos juegan a fútbol en los parques y en las plazas y se gritan: ¡hala, maño, pásala!
Gracias por venir

01 agosto 2006

Expurgos del alma

Ya tenemos wifi. Ayer me conecté con la qtek. Ok
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Expurgos del alma. Soltar lastre, despojarnos de las adherencias del vivir, esperar con la mirada transparente, ligeros de equipaje... [el mp3 de 4 gigas con los secretos del corazón, las canciones de la banda sonora de nuestra vida, las fotografías de la gente y de los horizontes, la carpeta "proyectos" en donde acumulamos las virutas de nuestro pensamiento... en fin, como los hijos de la mar].
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Si yo fuera Ángel González, no querría ser otra cosa que Ángel González, aunque también es cierto que si fuera Ángel González querría ser lo que no soy. Por la misma razón que ahora me gustaría llevar abrigo.


Ángel González recita Me basta así

San Lorenzo, 1936

"En agosto de 1936, la ciudad, tomada por los militares sublevados que decretaron el estado de guerra y sometida con la ayuda de Falange y grupos paramilitares de voluntarios como Acción Ciudadana, también estaba sujeta al incipiente cerco de los milicianos que trataban de reinstaurar la legalidad republicana. Las posiciones de Siétamo, Estrecho Quinto, Montearagón o Almudévar, eran hostilizadas por las columnas llegadas desde Cataluña con el propósito de contener en el frente de Aragón, la progresión franquista. En Huesca se había instalado el terror y la represión mientras la iglesia repartía sus bendiciones y celebraba la llegada del nuevo orden. En 1936 no hubo más fiesta laurentina que la religiosa".

Víctor Pardo Lancina


[En 4Esquinas, nº 182, Huesca, julio 2006, págs. 23-25 -Leer artículo completo-]